Es fundamental empezar
hablando de la Plaza de las Cuatro Calles, pasar por el Teatro del Circo, para
entender lo que hoy es la Plaza de Toros
de La Malagueta. Fue en 1492, en lo que
hoy conocemos como la Plaza de la Constitución, donde tenemos constancia que se
celebraban las primeras corridas de toros en Málaga, ubicando los chiqueros en
la boca calle de Larios, y con tribunas de madera portátiles. Pero conforme fue
creciendo el interés de la llamada fiesta nacional, los requerimientos cada vez
eran mayores y la imposibilidad de
seguir celebrándolas prácticamente en la calle comenzaba a ser un verdadero
problema que las administraciones de la época empezaban a plantear, y a buscar
distintas soluciones. De hecho los
graderíos de madera provisional fueron sustituyéndose por sillares de piedra
significando la consolidación de los festejos, pero ni esta decisión resulto
convincente a la afición taurina.
No fue hasta finales del
siglo XVIII que se produjo el cambio de ubicación, mudándose junto al mercado
del Carmen. La llamada ‘calle Plaza de Toros Vieja’ nos da una idea de la
ubicación de la misma ya que no existe ningún documento grafiado que nos
indique exactamente la ubicación y características de este coso. La siguiente
ubicación conocida está situada en el entorno del convento de San Francisco, al
borde del Guadalmedina, pero no duró más de 15 años entre polémicas referentes
al aforo posible. Y en 1864 se ubicó en los aledaños de la calle Compás de la
Victoria, en el conocido Teatro del Circo, que hacía sus veces de coso taurino
para no más de 3.000 personas, y que en su escenario tenían lugar una serie de
espectáculos públicos: teatrales, ecuestres y gimnásticos.
Fue la presión ciudadana por
la poca cabida existente, y el mal estado en el que se encontraban las
instalaciones, se creó una comisión de propaganda representada con distintos
prohombres de la ciudad para levantar una plaza de toros nueva. Así comenzó la
búsqueda de un nuevo emplazamiento, para el que se barajaron distintos lugares
considerados como idóneos como por ejemplo el llano de El Ejido, donde hoy se
ubica la universidad en el centro de Málaga; también se tuvo en cuenta el
limonar de Olletas, justo en la gasolinera de Fuente Olletas. Pero finalmente
se opta por un lugar conocido por los vecinos como ‘Haza de la Noria de
Reding’, y mucho más conocido como ‘La Malagueta’.
Es el Ayuntamiento el que
toma las riendas del proyecto evitando de esta manera el futuro control que
quería la comisión ciudadana sobre la Plaza, y realiza las obras en
colaboración con la Diputación de Málaga, pero una vez concluidas las obras,
será la Diputación la propietaria del 100% del recinto, debido a la cesión del
50% municipal como parte de pago de las deudas contraídas.
El arquitecto municipal
Joaquín de Rucoba y Octavio de Toledo fue el encargado de realizar el proyecto
y de ejecutar las obras de la nueva Plaza de Toros de la Malagueta. La Plaza es
de estilo neomudejar, teniendo forma de un hexágono, y no deja de ser
sorprendente que en tan sólo dos años se finalizara un edificio de semejantes
características, con un ruedo de 52 m de diámetro comprendido por una planta
baja, entreplanta y dos plantas superiores.
Fue el 11 de junio de 1876,
con la ganadería de Murube, con los diestros Rafael Molina “Lagartijo”, Antonio
Carmona y Luque “El Gordito” y Manuel Rodríguez “Desperdicios”, cuando se
produce su inauguración, con unos festejos taurinos que duraron 4 días.
Diferentes cambios ha
sufrido la edificación original, modificando sus chiqueros, ampliando el coso
para albergar a más de 9.000 personas; o la última modificación sufrida con la
ejecución del parking municipal por parte de la sociedad municipal de aparcamientos del Ayuntamiento de
Málaga, SMASA, en el año 2005 convino con la Diputación realizar cuatro plantas
de aparcamientos subterráneos bajo la calle Cervantes y los corrales de la
plaza de toros. Ello provocaba la desaparición total de los corrales existentes.
Aunque, como ya hemos constatado, apenas existía nada de los corrales
originales pues las instalaciones diseñadas por Rucoba en ese lugar se
demolieron en 1922 por Guerrero Strachan para empezar a usarse como corrales, y
en 1966 éstos fueron reformados y ampliados por el equipo del arquitecto
provincial Juan Jáuregui, quien incluso modificó el diseño de la tapia.
Al levantar de nuevo los
corrales, el arquitecto de la Diputación de Málaga Luis Machuca ha tenido que
reordenar las alineaciones para integrar en la fachada las distintas salidas
peatonales del aparcamiento subterráneo, cuyo proyecto pertenece a otros
arquitectos, aunque realmente dejó su huella con unas fachadas de vidrio
xerografiados, aportando el detalle del siglo XX a la plaza centenaria. Pero realmente
la Plaza de Toros de la Malagueta ha sido testigo mudo del espectacular cambio
urbanístico que ha vivido el barrio.
Es necesario referenciar que
la Plaza de Toros de La Malagueta, en 1976 año de su centenario, fue declarada
Conjunto Histórico-Artístico, y cinco años más tarde, en 1981, obtuvo la
calificación de Bien de Interés Cultural, obteniendo toda la protección
arquitectónica para futuras actuaciones en la misma.
La Malagueta es una plaza de
toros donde parcamente se contemplan alternativas, concediéndose durante sus
140 años de existencia escasas casi 40 ceremonias de investidura de matador de
toro. Tuvieron que pasar 38 años desde su inauguración para que el coso taurino
malagueño fuera escenario para la primera alternativa tal como hoy la conocemos.
El primer torero que recibió la alternativa en La Malagueta fue el malagueño
Matías Lara 'Larita' hecho acaecido el 1 de septiembre de 1914 con Paco Madrid
de padrino y Juan Belmonte de testigo y toros de González Landin.
Esta plaza, de 1ª categoría,
es un recinto taurino de temporada, y entre sus festejos cabe destacar las dos
corridas de toros en Semana Santa, que incluyen la
denominada "Corrida Picassiana", la "Corrida de la
Prensa" que se celebra en el mes de junio por la festividad de los Santos
Patronos San Ciriaco y Santa Paula, los festejos durante la Feria de Agosto y
la corrida de toros en el mes de septiembre coincidiendo con la festividad de
la Patrona malagueña.
Pero sobre todo la Plaza de
Toros desde hace muchos años que se ha convertido en la ‘Plaza de Todos’,
sabiendo compaginar actos de carácter político, como la actuación de Joan
Manuel Serrat en el mitin de la primera campaña de Felipe González. Conciertos de todo tipo de música, de los que
destaco el de Silvio Rodríguez en los años 90, o los primeros conciertos de
Alejandro Sainz en nuestra ciudad.
En la actualidad, la Plaza
de Toros de La Malagueta, no solo es un referente taurino de nuestra ciudad,
sino también es punto de encuentro de diferentes actividades como pueden ser
eventos solidarios, conciertos, exposiciones, o la gran concentración de
productos malagueños en el mes de diciembre de la mano de Sabor a Málaga.